Hoy os traemos un rapidísimo paso a paso en el que os mostramos cómo hacer unas palmeritas de hojaldre en sólo unos minutos. Pensaréis que siempre decimos lo mismo sobre nuestras recetas, pero esta vez es mas cierto que nunca... son súper-fácileeeees!!!! ;)
Veréis como están hechos en un momentito y están deliciosas... son un vicio!
Ingredientes:
· Una lámina de hojaldre
· Azúcar
· Un huevo (para pintar)
· Brocha
· Cuchillo
· Rodillo
Preparación:
Abrimos la lámina de hojaldre y la extendemos sobre la mesa de trabajo una vez está a temperatura ambiente (podemos sacarla de la nevera unos 15 minutos antes).
Espolvoreamos toda la lámina con azúcar, y lo prensamos un poquito con un rodillo para integrar el azúcar en la masa. Tenemos que cubrir toda la lámina, pero sin pasarnos de azúcar, porque podríamos impedir que se peguen las dobleces (ver siguiente paso).
Doblamos un extremo de la lámina hasta el centro del hojaldre y hacemos lo mismo con el otro extremo, tal y como os mostramos en la foto:
Espolvoreamos otra vez con un poquito de azúcar y volvemos a marcar con el rodillo.
Doblamos por última vez colocando una mitad sobre la otra, le damos la vuelta (para que no se abra y nos resulte más fácil cortarlo) y apretamos un poco con los dedos para sellar un poco las partes.
Cortamos porciones de 1 cm aproximadamente y las colocamos en una bandeja de horno con papel vegetal, dejando un poco de separación entre ellas para que no se nos peguen al hornearse, ya que el hojaldre crece bastante al cocinarse.
Pintamos con un poco de huevo batido y las horneamos unos 8-10 minutos a 180º, les damos la vuelta y las horneamos unos 3-5 minutitos más. Como cada horno es un mundo, tenemos que vigilar que no se os tuesten demasiado... esos minutos pueden ser cruciales y marcar la diferencia entre "doradas" y "chamuscadas".
Cortamos porciones de 1 cm aproximadamente y las colocamos en una bandeja de horno con papel vegetal, dejando un poco de separación entre ellas para que no se nos peguen al hornearse, ya que el hojaldre crece bastante al cocinarse.
Cuando estén listas las sacamos del horno, las dejamos reposar un poquito. Si somos capaces de esperar a que se enfríen del todo, mejor, sino (como es nuestro caso), las dejamos reposar lo justo para no achicharrarnos la lengua... y a devorarlaaaaas!!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario